Nuestra quinta entrega de "La Iglesia nueva", es el cuarto capítulo de el libro de Monseñor Lefebvre que, como verán, se trata de una carta dirigida al Papa Paulo VI
Monseñor Marcel Lefebvre |
CAPÍTULO IV
CARTA AL SANTO
PADRE
31 de mayo de 1975
Santísimo Padre:
Prosternado a los pies de Vuestra
Santidad, Le aseguro mi entera y filial sumisión a las decisiones que me ha
comunicado la Comisión Cardenalicia en lo que concierne a la Fraternidad San
Pío X
y al seminario.
Vuestra Santidad podrá sin embargo
juzgar por el Informe adjunto 1 si en el procedimiento han
sido observados los derechos naturales y canónicos. Cuando pienso en la
tolerancia que usa Vuestra Santidad ante los obispos holandeses y teólogos como
Hans Küng y Cardonnel, no puedo creer que las crueles decisiones tomadas a mi
respecto provengan del mismo corazón.
Si es verdad que el único motivo
de acusación tenido en cuenta es mi DECLARACIÓN del 21 de noviembre de 1974,
suplico a Vuestra Santidad que me remita al Dicasterio competente: la
Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe.
Oh,
cuánto deseo que Vuestra Santidad se digne un día recibir a los miembros de la
Fraternidad Sacerdotal San Pío X y a sus seminaristas, con su pobre superior.
Vuestra Santidad comprobaría sin vacilaciones su profunda devoción y veneración
hacia el sucesor de Pedro y su único deseo de servir a la Iglesia bajo su
báculo pastoral.
No
hay duda de que su preocupación por conservar una fe pura e íntegra en medio de
la confusión de ideas de este mundo se une con la de Vuestra Santidad y si a
veces la expresan de una manera un tanto apasionada, que Vuestra Santidad les
perdone un celo tal vea excesivo para la defensa de la fe, pero que surge de
almas generosas y prontas a dar hasta su sangre por la defensa de la Iglesia y
de su Jefe, a ejemplo de los macabeos y de todos los mártires.
1 Es
el documento reproducido en el
capítulo III.