Número CCCXXXV (335)
14 de diciembre 2012
Monseñor Richard Williamson |
Permítanme citar al Padre Olivier
Rioult en su entrevista del 6 de Octubre en París (cf. EC 333) sobre otra
cuestión, muy discutida dentro de la Resistencia Católica de hoy – la cuestión
de una organización. Se le preguntó al Padre Rioult si él pensaba en la
posibilidad de implementar una nueva organización a nivel mundial, o si tendría
que ser una cierta forma de asociación libre, un poco como la asociación de los
sedevacantistas desde hace algunos años. He aquí su contestación, esta vez en
sus propias palabras:
“En los próximos meses, podría
crear una especie de asociación libre basada sobre la amistad con otros
Católicos de la Resistencia, sean o no sedevacantistas, siendo el
sedevacantismo para mí una opinión. Pero la situación no está madura aquí y ahora
para tal asociación. En todo caso, todo lo que es católico, es nuestro. De tal
manera que cualesquiera Católicos haya dispuestos a trabajar como Católicos y a
resistir al Modernismo que tiene el poder dentro de la Iglesia, nosotros
trabajaremos juntos. Por consiguiente, sí, a una especie de asociación amplia
compartiendo el mismo bien común: la Fe, el culto de la Iglesia católica y la
defensa de la Fe. Tener este mismo bien común puede crear amistad entre todos
los grupos.
“Pienso que en la medida en que
nos aproximamos al fin de los tiempos, los Católicos tendrán siempre más que
ser anarquistas, no en principio pero en la práctica. Con eso quiero decir que
tendrán que enfrentarse a todos los poderes que sean, por la razón que estos
habrán sido neutralizados, infiltrados o subvertidos, operando contrariamente
al orden natural. De aquí que, en la práctica, los Católicos tendrán que
enfrentarse a todos poderes, sea en la Iglesia o en el Estado... porque habrán
sido todos desviados de su fin, bajo la influencia Masónica... en todo caso al
servicio del Príncipe de este mundo. Por eso pienso que será muy difícil crear
de ahora en adelante estructuras a nivel mundial. El sacerdote francés
Dominico, Padre Roger Calmel, tenía una visión muy clara de la situación. Ya
desde 1970 decía que los líderes naturales en cualquier lugar tendrán que hacer
resplandecer su ministerio cada uno en su lugar, estando reunidos por lazos
sencillamente amistosos a los líderes de los otros lugares.
“En 1970, en la revista francesa
“Itinéraires” (# 149), escribió: ‘El combate por la Fe tendrá que ser conducto
por pequeños grupos rehusando entrar en cualesquiera organizaciones
estructuradas o universales. Dentro de estos grupos, tales como una escuela
pequeña, un convento humilde, un grupo de oración, una reunión de familias
cristianas o la organización de una peregrinación, la autoridad es real y
aceptada por todos... Todo lo que se precisa es que cada Católico vaya hasta
los límites de su gracia y de su autoridad en la pequeña esfera que le
corresponde ciertamente liderar, y de la cual se hará cargo sin tener por
encima de él ninguna gran estructura administrativa que lo obligue a actuar’”.
Si el Padre Calmel escribió eso
en 1970 para las circunstancias de 1970, uno podría decir o que estaba viendo
demasiado lejos en el futuro o que Monseñor Lefebvre, con la organización de la
Fraternidad San Pío X, ha mostrado lo que era todavía posible en 1970. Pero
pienso realmente que el Padre Calmel tenía razón con el transcurso del tiempo.
Se podría decir, observando lo que ocurrió a la Fraternidad el año pasado, que
estaba destinada a tener los días contados. Monseñor Lefebvre, como el Papa San
Pío X, ha llevado a cabo una acción maravillosa de retaguardia, pero hay que
observar cuanto menos el Arzobispo pudo realizar actuando 70 años después del
Papa. Y ahora transcurrieron otros 40 años más desde el inicio de la obra del
Arzobispo. En un mundo caminando hacia su ruina, la realización de la profecía
del Padre Calmel no podía verse indefinidamente retrasada.
Estimados lectores, si nosotros
deseamos no abandonar a Nuestro Señor, no tenemos otra opción más que
prepararnos a la lucha. En mi opinión, el Padre Calmel y el Padre Rioult están
en lo cierto. Santa Madre de Dios, Socorro de los Cristianos, ¡Ayúdanos!
Kyrie eleison.